Ella es una chica de buena cordura que siempre evitaba los problemas que atraviesan la ruta de los adolescentes. Su nombre es Mercedes pero todos la llaman Merci, con el sonido entre “mercí” en francés y “mercy” en inglés. Ella era una buena costurera y nunca encontró ninguna tijera que no le obedeciera. Sin embargo, su tiempo libre era escaso debido que ella era una buena estudiante y también asistía a clases de Pilates. Hoy es un mal día porque en la mañana encontró que su querida mascota ha muerto, una tortuga que se llamaba Dulcinea. Merci cavó un pequeño hueco, se despidió de Dulcinea y la enterró. Luego se dijo "Olvidé lavar mi pelo, y tengo que ir a visitar a la Sra. Morales.” Ella lamentaba que la señora le hubiera pedido ir hoy. Pero, era una buena tarea y a Merci le caía bien la Sra. Morales. De hecho La señora morales le había pedido usar su nombre de pila si merci lo deseara así lo. Su nombre era Camila y era una viuda joven de treinta y ocho años.
Merci salió de la casa y condujo a la casa de Camila. Le encantaba el patio con jardines de flores que tienía Camila. Era mayo y el jardín parecía un arcoiris desordenado; Merci sabía que había un espacio muy ordenado en la esquina del patio trasero, también había una estatua de la Virgen de Guadalupe rodeada por flores blancas. El patio trasero contenía estas flores, una cerca de piedra y césped grueso. Cuando Merci terminaba su costura las dos solían sentarse y charlar detrás de la casa. Era muy tranquilo. A veces, charlaban animadamente sobre sus planes o las noticias. Otras veces, no decían mucho, pero siempre era un silencio cómodo.
Cuando Merci se acercó a la entrada,Camila abrió la puerta y se paró allí por un minuto y dijo con la mano “entra.” Camila tenía una cara linda. Parecía simpática con sus ojos verdes y su sonrisa lista. Luego se dio vuelta y desapareció.
Esa tarde Camila y Merci se sentaron como siempre en el patio y sacaron su trabajo de costura. Camila tenía su vestido y Merci comenzó una inspección minuciosa . Ella sabía que necesitaba hacerlo más corto pero la falda del vestido era de dos partes y tenía un parte una de ellas era debajo translúcida de gasa. Y había que descoser la unión de las dos telas. Tuvo que hacerlo para poder acortar la falda antes de la costura. La falda tenía un forro, y Merci se enteró que el panel transparente de gasa estaba pegado al forro. Si este hubiera estado pegado a la tela fina, el trabajo habría sido casi imposible de hacer sin arruinar la tela delicada de la falda. Merci pensaba, “Hay tres pasos - primero, tengo que descoser la unión de la gasa y el forro, ya que, Están cosidos muy delicadamente. El segundo paso es cortar la falda y el forro. Por último, tengo que hacer una unión nueva entre la gasa y el forro, sin arrugas ni errores.”
Tan pronto ella descubrió la unión, comenzó a descoser muy delicadamente.
pasada una hora y media, Camila llamó a Merci y puso su costura en la mesa y se paró. Merci estaba un poco confundida después de noventa minutos de trabajo intrincado. No tenía mucho sentido del tiempo cuando estaba inmersa en el trabajo.
—Hola, ¿que hora es? Dijo Merci.
—Son las dos y media. He hecho algunos bocadillos [picadas] y tengo limonada. Necesitas un receso y debes relajarte un rato.¿Como va tu tarea?
—Buena idea, he separado la gasa y ha ido bien pero fue un reto, un receso parece muy atractivo y ya me duelen los ojos.
Ellas entraron al comedor, había mucha luz porque el lado del cuarto daba al jardín. Dos ventanas grandes y un par de puertas proveían luz del sol. Merci miró los platos encima de la mesa mientras Camila bajaba las persianas.
Ellas comieron queso, aceitunas ,salmón ahumado y charlaron sobre la escuela de Merci y los planes de vacaciones de Camila. Cuando fueron las tres y cuarto Merci regresó a su mesa en el patio para seguir con su tarea.
Ella hizo el dobladillo casi tres centímetros más corto. No fue muy difícil pero Merci pasó dos horas haciéndolo. Con cuidado cosió la gasa al forro. Tenía que evitar los frunces principalmente . Con puntadas muy pequeñas ella la cosió. En breve adjuntó el forro a la falda. Ella remató el vestido con un suspiro de alivio.
Entró a la casa y se lo mostró a Camila. Camila lo colgó y le dijo — ¡Genial! Ahora está perfecto. Son casi las nueve, podría llamar a tu madre y pedirle que te quedes aquí, de esa manera no tendrás que conducir hasta tu hogar. Vamos al restaurante y cuando volvamos aquí puedo probarme el vestido y me puedes decir tu opinión.
—Es imposible - no tengo ropa para llevar, no puedo salir al restaurante.
Camila le miró y dijo
—No hay problema, no te apures, tenemos la misma talla de pies a cabeza. Tengo un vestido que te quedará perfecto. El es un midi-vestido acanalado de lana delgada. Es un poco escotado, tiene tiras de espagueti ,es de malva ,tengo sandalias negras con tirantes y una bolsa de pulseras negra de charol. Cuán bonita vas a parecer en ese atuendo.
Camila la llamó y ellas hablaron cordialmente. Son amigas y después de un intercambio de saludos y una plática cordial sobre la familia y salud, Camila le dijo que ellas cenarían juntas y que Merci dormiría allí. Ella colgó el teléfono y le dijo a Merci que todo estaba arreglado
Ellas no fueron a un restaurante sino más bien a un club en la terraza en un rascacielo donde cenaron. La comida estuvo deliciosa y pasaron un linda noche.
Cuando volvieron a la casa ambas estaban emocionadas porque Camila se pondría el vestido y checaria el largo. Camila se puso el vestido en su habitación mientras Merci estaba orgullosa y nerviosa al mismo tiempo. Cuando Camila volvió Merci sintió que su corazón palpitaba. Camila estaba hermosa, llevaba tacones de color gris palomo y cartera /bolsa de noche del mismo color. El vestido combinaba perfectamente con el color de los zapatos. El borde transparente casi le llegaba a sus rodillas y la unión entre los paneles era perfectamente lisa. El vestido entallado a su figura como un guante suave hasta que la falda abría . Otra vez Merci suspiró de alivio y le dijo — Hermosa, pareces una reina.
Camila la abrazó y dijo —Eres muy, muy buena. Muchisima gracias. Estoy segura que algún día vas a ser un modista famosa. Debes estar agotada, tenemos que acostarnos.
Ellas se retiraron a sus cuartos. Merci halló un camisón rosa y toallas encima de la cama y sonrió. Dobló la colcha y se metió en la cama. Ella se durmió muy contenta.
Luego de levantarse y vestirse, ella salió y encontró a Camila en el comedor llevando una bandeja de café, jamón y bollos de pan. Ellas se sentaron y comieron con gusto.
— ¿Quisieras ayudarme? Estoy escribiendo una carta para los Amigos de la biblioteca necesito una editora . Dijo Camila.
— Por supuesto. Replicó Merci, y Camila fue a su escritorio y volvió con un archivo que le dio al instante
Merci lo abrió y leyó en voz alta —
Hola todos. Les invito a visitar y usar la biblioteca. Es un lugar que ofrece un ambiente amable y es la ruta tradicional para enriquecer sus vidas. Nuestro héroe Benjamin Franklin fundó la primera biblioteca en los EEUU y de joven se beneficiaba mucho por libros disponibles. Tenemos recursos amplios — no solo libros, también la biblioteca es una hemeroteca y mucho más. Entonces les voy a invitar a nuestro grupo, “Los amigos de la biblioteca”, pueden convertirse en un miembro por solo diez dólares. por favor lean el folleto incluido y descubran todos los beneficios.
Merci le dijo — No deberías cambiar nada, Está bien. Ahora debo despedirme para llegar a tiempo mi clase de Pilates. Todo fue genial. Gracias por la cena y la noche, sobre todo me encantó nuestro tiempo juntas. Eres una buena amiga.
— Un momento — dijo Camila y puso un billete en el bolsillo trasero de los pantalones de yoga de Merci. Luego intercambiamos besos en las mejillas. Camila se quedó en la puerta y Merci, muy contenta, condujo a su clase.